Consecuciones

Sueño, son las dos menos diez del mediodía y sólo tengo sueño. Hambre, ahora que miro el reloj me doy cuenta de que también tengo hambre. Pensando en la comida me doy cuenta también que tengo ganas de comer, de comerme a bocados (y no estoy hablando de placer sexual) al próximo o próxima gilipollas que se asome por la puerta con ánimo de vacilarme y/o tocarme los huevos (cosa que no tengo). Sacarle los ojos con una cucharilla de café. Pensando en esa agresión pienso que después de haber comido no me vendría nada mal un cafecito con leche y luego una siesta. Siesta, sosiego, descanso, ahora mi mente descansa, ya ha comido, tomado el café y dormido la siesta. Ahora soy persona de nuevo (por decir algo).